efectos negativos de la marihuana
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¿Cuáles son los efectos negativos de la marihuana?

Efectos negativos de la marihuana

La marihuana, también conocida como cannabis, es una sustancia psicoactiva que genera una amplia gama de efectos en el cuerpo y la mente.

Si bien en algunos contextos se promueve su uso con fines terapéuticos o recreativos, es crucial abordar con claridad los efectos negativos de la marihuana, especialmente cuando el consumo se vuelve habitual o se inicia a una edad temprana.

Desde una mirada cognitivo-conductual, explorar cómo el uso de marihuana afecta el comportamiento, los pensamientos, las emociones y las relaciones sociales permite tomar decisiones informadas y fomentar un abordaje preventivo o terapéutico cuando sea necesario.

efectos negativos de la marihuana
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¿Cómo afecta la marihuana al cerebro?

El principal compuesto activo de la marihuana, el tetrahidrocannabinol (THC), interactúa con el sistema endocannabinoide del cerebro. Esta interacción altera funciones clave como el estado de ánimo, la percepción del tiempo, la memoria, la atención y la coordinación motora. Aunque algunos efectos pueden parecer placenteros al inicio, el uso frecuente o excesivo puede derivar en consecuencias adversas significativas.

Principales efectos negativos de la marihuana

1. Alteraciones cognitivas

Uno de los efectos negativos de la marihuana más documentados es la afectación de las funciones cognitivas. Entre ellas:

  • Pérdida de memoria a corto plazo.
  • Dificultad para concentrarse o sostener la atención.
  • Reducción de la velocidad de procesamiento mental.
  • Problemas para la toma de decisiones.

Estos efectos pueden interferir en el rendimiento académico, laboral o en la vida cotidiana, especialmente si el consumo es crónico.

2. Aumento del riesgo de ansiedad y paranoia

Contrario a la creencia de que la marihuana “relaja”, muchas personas experimentan:

  • Episodios de ansiedad aguda.
  • Crisis de pánico.
  • Pensamientos paranoides (“todos me miran”, “algo malo va a pasar”).

Desde la perspectiva cognitivo-conductual, estos síntomas están mediados por interpretaciones distorsionadas de la realidad y respuestas fisiológicas desreguladas, que el THC puede intensificar.

3. Riesgo de desarrollar trastornos del estado de ánimo

El consumo habitual se ha asociado con mayor prevalencia de:

  • Síntomas depresivos.
  • Disminución de la motivación.
  • Apagamiento emocional.

Esto puede deberse a una combinación de factores neuroquímicos (como la desregulación dopaminérgica) y comportamentales (uso como forma de evitación emocional).

4. Potencial de dependencia psicológica

Aunque muchas personas afirman que la marihuana “no genera adicción”, el DSM-5 reconoce el trastorno por consumo de cannabis, caracterizado por:

  • Tolerancia (necesidad de consumir más para sentir el mismo efecto).
  • Síntomas de abstinencia al dejarla (irritabilidad, insomnio, ansiedad).
  • Deseo persistente o esfuerzos fallidos por reducir el consumo.
  • Uso continuado a pesar de consecuencias negativas.

La dependencia puede instalarse de forma progresiva y es más común en quienes inician el consumo en la adolescencia.

Esta dependencia puede llevarte a experimentar los efectos de la marihuana a largo plazo.

5. Impacto en la motivación y la productividad

El llamado síndrome amotivacional se caracteriza por:

  • Falta de interés en actividades significativas.
  • Dificultad para establecer y alcanzar metas.
  • Pérdida del entusiasmo por el futuro.

Este patrón puede llevar a una vida desorganizada, con bajo rendimiento académico o laboral, afectando también la autoestima.

6. Alteración del sueño

Aunque algunas personas consumen marihuana para dormir, el uso crónico puede:

  • Disminuir el sueño REM (etapa vinculada a la consolidación de la memoria).
  • Generar insomnio cuando se intenta suspender el consumo.
  • Producir despertares frecuentes durante la noche.

La regulación del sueño, desde una perspectiva conductual, requiere consistencia, higiene del sueño adecuada y evitar sustancias que interfieran en los ciclos naturales.

7. Problemas sociales y familiares

El consumo frecuente puede generar conflictos con personas cercanas debido a:

  • Cambios en el estado de ánimo o comportamiento.
  • Incumplimiento de responsabilidades.
  • Aislamiento o falta de interés en vínculos afectivos.

Desde la terapia cognitivo-conductual, se entiende que la evitación de situaciones sociales complejas a través del consumo puede profundizar los problemas relacionales.

8. Afectación del desarrollo cerebral en adolescentes

Los estudios muestran que el consumo durante la adolescencia puede interferir en el desarrollo neurológico, especialmente en áreas relacionadas con el juicio, la regulación emocional y la planificación.

Esto aumenta el riesgo de:

  • Trastornos psiquiátricos en la adultez.
  • Bajo rendimiento académico.
  • Comportamientos impulsivos o de riesgo.

9. Riesgo de episodios psicóticos

En personas con vulnerabilidad genética, el consumo de marihuana puede desencadenar síntomas psicóticos como:

  • Alucinaciones.
  • Delirios.
  • Pérdida de contacto con la realidad.

Esto ocurre especialmente con variedades de marihuana con alto contenido de THC y bajo de CBD, y cuando el consumo es frecuente o iniciado a edades tempranas.

Efectos negativos físicos de la marihuana

Aunque muchas veces se piensa que la marihuana solo tiene implicancias psicológicas, también puede afectar al cuerpo:

  • Irritación pulmonar: especialmente si se fuma.
  • Aumento de la frecuencia cardíaca, lo que puede ser riesgoso en personas con antecedentes cardiovasculares.
  • Disminución de la fertilidad masculina.
  • Problemas gastrointestinales, en algunos casos, como el síndrome de hiperemesis cannabinoide.

Sugerencias para quienes desean reducir el consumo

Desde la psicología cognitivo-conductual, se han desarrollado estrategias efectivas para reducir el uso de sustancias como la marihuana.

Aquí te comparto algunas recomendaciones prácticas:

1. Registra tus hábitos de consumo

Anota cuándo, cuánto y por qué consumes.

Esto te permitirá identificar patrones automáticos y momentos de mayor vulnerabilidad.

2. Define objetivos claros

Puedes comenzar con metas pequeñas, como reducir la frecuencia semanal o establecer días sin consumo.

3. Reemplaza el consumo por estrategias de afrontamiento saludables

Ejercicio, técnicas de respiración, escritura, meditación o actividades placenteras no asociadas al uso.

4. Cuestiona tus pensamientos automáticos

Frases como “sin fumar no puedo dormir” o “solo me relajo así” pueden ser desafiadas con evidencia y reemplazadas por pensamientos más funcionales.

5. Busca apoyo

La terapia individual, los grupos de apoyo o programas psicoeducativos pueden ser fundamentales para sostener el cambio. Un psicólogo online puede resultarte de mucha ayuda.

Conclusión

Comprender los efectos negativos de la marihuana no significa demonizar su uso ni juzgar a quienes la consumen, sino ofrecer una mirada informada y basada en evidencia.

Desde una perspectiva cognitivo-conductual, el consumo puede responder a funciones específicas en la vida de una persona: aliviar el malestar, escapar del aburrimiento, o evitar emociones difíciles.

Sin embargo, cuando se convierte en una solución habitual, puede traer consecuencias emocionales, cognitivas, relacionales y físicas importantes.

Si sientes que el uso de marihuana está interfiriendo en tu bienestar, recuerda que hay herramientas disponibles y profesionales que pueden acompañarte en un proceso de autoconocimiento, regulación emocional y fortalecimiento personal.

Recursos útiles a explorar

Referencias bibliográficas

  • Volkow, N. D., Baler, R. D., Compton, W. M., & Weiss, S. R. (2014). Adverse health effects of marijuana use. New England Journal of Medicine, 370(23), 2219–2227.
  • Hall, W., & Degenhardt, L. (2009). Adverse health effects of non-medical cannabis use. The Lancet, 374(9698), 1383–1391.
  • Budney, A. J., & Hughes, J. R. (2006). The cannabis withdrawal syndrome. Current Opinion in Psychiatry, 19(3), 233–238.