Efectos de la marihuana a largo plazo
La marihuana es una de las sustancias psicoactivas más utilizadas en el mundo, especialmente entre jóvenes y adultos jóvenes, desconociendo muchas veces los efectos de la marihuana a largo plazo tanto para la salud mental como física.
Su consumo se ha normalizado en muchos contextos, tanto por sus supuestos beneficios recreativos como por su uso medicinal.
Sin embargo, cuando hablamos de los efectos de la marihuana a largo plazo, es fundamental diferenciar entre consumo ocasional, uso crónico y dependencia, así como conocer el impacto que puede tener sobre la salud física, mental y el funcionamiento psicológico general.
Desde el enfoque cognitivo-conductual, se entiende que toda conducta de consumo tiene una función, ya sea como forma de regulación emocional, escape de situaciones estresantes o búsqueda de gratificación inmediata.
Comprender los efectos sostenidos del uso de marihuana es clave para intervenir adecuadamente cuando aparecen consecuencias negativas en la vida cotidiana.
En este artículo, analizaremos qué dice la evidencia sobre los efectos de la marihuana a largo plazo, cómo estos impactan la salud mental y emocional, y qué estrategias pueden ayudar a tomar decisiones más informadas o incluso iniciar un proceso de cambio si fuera necesario.

¿Qué contiene la marihuana y cómo actúa en el cerebro?
La marihuana, también conocida como cannabis, contiene más de 100 compuestos químicos llamados cannabinoides, siendo el tetrahidrocannabinol (THC) el principal responsable de sus efectos psicoactivos.
El THC actúa sobre receptores del sistema endocannabinoide, que está implicado en funciones como el estado de ánimo, la memoria, el apetito, el sueño y la percepción del dolor.
El consumo agudo de marihuana puede producir sensaciones de euforia, relajación, alteración de la percepción del tiempo y del espacio, entre otros efectos.
Sin embargo, cuando se consume de forma frecuente y prolongada, estos efectos pueden volverse disfuncionales.
Efectos de la marihuana a largo plazo: una visión integral
Los efectos de la marihuana a largo plazo pueden variar según la edad de inicio, la frecuencia, la potencia del THC, el contexto social y las vulnerabilidades personales.
A continuación, revisamos los impactos más relevantes desde la perspectiva psicológica y neuroconductual.
1. Déficits cognitivos sostenidos
Estudios han demostrado que el uso crónico de marihuana puede afectar funciones ejecutivas como la atención sostenida, la memoria de trabajo, la velocidad de procesamiento y la toma de decisiones.
Esto es especialmente significativo cuando el consumo comienza en la adolescencia, etapa crítica del desarrollo cerebral.
Desde la terapia cognitivo-conductual, estos déficits pueden dificultar el seguimiento de objetivos, la solución de problemas y la autorregulación emocional.
2. Síntomas ansiosos y depresivos
Aunque algunas personas consumen marihuana para reducir la ansiedad o “sentirse más tranquilos”, el uso frecuente puede agravar estos síntomas a largo plazo.
Estudios longitudinales indican una asociación entre consumo crónico y mayor riesgo de trastornos de depresión y ansiedad.
Además la marihuana y ansiedad tienen una relación más estrecha, ya que los efectos de la ansiedad como los pensamientos intrusivos negativos o los pensamientos catastróficos, al ser amplificado por los efectos psicoactivos de la marihuana, pueden llevar a experiencias desagradables para el consumidor, como sensación de encierro, pensamientos persecutorios o la llamada popular “pálida” (una baja de presión).
El uso de la sustancia como estrategia de afrontamiento evita el desarrollo de recursos más adaptativos, como la exposición gradual a situaciones difíciles o la reestructuración cognitiva.
3. Mayor riesgo de trastornos psicóticos
El consumo prolongado y en altas dosis de THC está relacionado con un aumento del riesgo de síntomas psicóticos, especialmente en personas con vulnerabilidad genética o antecedentes familiares.
Esto incluye ideas delirantes, alucinaciones y desorganización del pensamiento.
4. Síndrome amotivacional
Uno de los efectos de la marihuana a largo plazo más discutidos es la aparición de un cuadro llamado “síndrome amotivacional”, caracterizado por apatía, pérdida de iniciativa, dificultad para establecer metas, y menor rendimiento académico o laboral.
Desde el enfoque cognitivo-conductual, se interpreta como una reducción de conductas reforzadas socialmente, con una disminución progresiva de las actividades valiosas.
5. Tolerancia, dependencia y abstinencia
El consumo repetido lleva a la necesidad de usar mayores dosis para conseguir el mismo efecto (tolerancia), así como a la aparición de síntomas de abstinencia cuando se interrumpe el consumo (irritabilidad, insomnio, ansiedad, disminución del apetito).
Cuando se desarrolla dependencia, la persona pierde el control sobre el consumo, a pesar de consecuencias negativas en su vida personal, laboral o académica.
Impacto en áreas clave de funcionamiento
Los efectos a largo plazo del cannabis también pueden observarse en diferentes dominios del funcionamiento cotidiano:
Área | Efectos comunes |
---|---|
Académico/laboral | Bajo rendimiento, ausentismo, dificultades de concentración. |
Relacional | Aislamiento, conflictos con pareja o familia por el uso. |
Físico | Problemas respiratorios, mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares. |
Motivacional | Dificultad para planificar, iniciar o sostener proyectos personales. |
Legal y económico | Problemas legales por posesión o gasto excesivo en sustancia. |
Factores de riesgo para un uso problemático
Algunos factores aumentan la probabilidad de desarrollar consecuencias negativas por el uso de marihuana:
- Inicio del consumo en la adolescencia.
- Uso diario o casi diario.
- Alta concentración de THC (variedades modernas pueden superar el 20%).
- Antecedentes familiares de trastornos del ánimo o psicóticos.
- Consumo para “escapar” de emociones difíciles.
¿Qué rol cumple la marihuana en la regulación emocional?
Desde la perspectiva cognitivo-conductual, muchas personas recurren a la marihuana como forma de evitación experiencial: evitar pensamientos, emociones o sensaciones desagradables a corto plazo.
Este patrón puede volverse problemático porque refuerza la idea de que no se puede lidiar con el malestar sin consumir, debilitando otras estrategias más saludables como:
- Identificación y cuestionamiento de pensamientos intrusivos automáticos.
- Exposición progresiva a situaciones temidas.
- Regulación emocional basada en la respiración (ejemplos de ejercicios de respiración), mindfulness o actividad física.
Sugerencias prácticas para quienes consumen marihuana
Si te identificas con alguno de los efectos descritos o te preocupa tu relación con la marihuana, considera estas estrategias:
1. Evalúa el impacto
Haz un listado honesto de cómo el consumo afecta distintas áreas de tu vida (salud, trabajo, relaciones, emociones).
2. Observa los patrones de consumo
¿Consumes cuando estás aburrido, ansioso, estresado? Registrar el contexto puede darte pistas sobre las funciones del consumo.
3. Realiza pausas
Intenta hacer períodos sin consumo. Evalúa cómo te sientes. Esto puede ayudarte a notar si hay tolerancia o dependencia psicológica.
4. Fortalece habilidades de afrontamiento
Explora técnicas para manejar el estrés sin sustancias: meditación, ejercicio, escritura emocional, terapia.
5. Considera apoyo profesional
Si sientes que no puedes controlar el consumo o aparece malestar significativo, la ayuda psicológica puede ser clave.
La terapia cognitivo-conductual ha mostrado alta efectividad en tratamientos por consumo problemático. Busca una atención psicológica online.
Conclusión
Los efectos de la marihuana a largo plazo no deben subestimarse. Si bien no todas las personas que consumen desarrollan problemas, el uso crónico y frecuente puede tener consecuencias relevantes en el funcionamiento emocional, cognitivo, social y físico.
Desde la psicología cognitivo-conductual, el objetivo no es juzgar ni etiquetar, sino comprender la función del consumo en la vida de cada persona y promover estrategias más eficaces para lidiar con el malestar, construir hábitos saludables y tomar decisiones conscientes.
Si has notado que la marihuana ha pasado de ser una experiencia ocasional a una necesidad diaria, puede ser momento de detenerte, observar y considerar nuevas formas de cuidarte.
Recursos útiles a explorar
- Guía del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas (NIDA) sobre la marihuana – en español
- Psiconet – Psicoterapia para consumo problemático en América Latina
Referencias bibliográficas
- Volkow, N. D., et al. (2014). “Adverse health effects of marijuana use.” The New England Journal of Medicine, 370(23), 2219–2227.
- Meier, M. H., et al. (2012). “Persistent cannabis users show neuropsychological decline from childhood to midlife.” Proceedings of the National Academy of Sciences, 109(40), E2657-E2664.
- Budney, A. J., et al. (2007). “Marijuana dependence and its treatment.” Addiction Science & Clinical Practice, 4(1), 4–16.
Pingback: ¿Cuáles son los efectos negativos de la marihuana? - Terapia con Razón