¿El narcisista no tiene empatía?
Una de las creencias más extendidas sobre las personas con rasgos narcisistas es que carecen completamente de empatía.
Esta afirmación suele surgir de experiencias dolorosas, en las que se sintieron ignoradas, manipuladas o emocionalmente abandonadas.
Pero desde la psicología cognitivo-conductual, la realidad es más compleja: no siempre es que el narcisista no tiene empatía, sino que su capacidad empática está condicionada, limitada o dirigida hacia fines ego-referenciales.
En este artículo exploramos qué sucede con la empatía en el trastorno narcisista, cómo se manifiesta y qué implicancias tiene en las relaciones afectivas.

Comprendiendo la empatía en el narcisismo
¿Qué es la empatía desde una perspectiva TCC?
La empatía se define como la capacidad de reconocer, comprender y responder adecuadamente a las emociones de otra persona.
Desde la psicología cognitivo-conductual, implica tanto un componente cognitivo (entender lo que el otro siente) como emocional (conectar afectivamente con esa emoción).
Una persona puede tener habilidades cognitivas para leer el estado emocional de los demás, pero no sentir una conexión emocional real.
Es lo que se observa frecuentemente en el narcisismo.
¿El narcisista nace sin empatía?
No.
La mayoría de los narcisistas no nacen sin empatía, pero aprenden a bloquearla, suprimirla o utilizarla con fines manipulativos.
Esto se debe a varios factores:
- Experiencias tempranas de invalidación o crítica excesiva.
- Ambientes familiares donde se valoraba más la apariencia que la emoción.
- Aprendizaje de que “sentir” es sinónimo de debilidad.
Así, el narcisista no tiene empatía disponible cuando entra en juego su autoestima frágil o su miedo al rechazo.
Su sistema interno prioriza la autoprotección por sobre la conexión emocional.
Formas en que el narcisista evita o distorsiona la empatía
1. Empatía selectiva o estratégica
El narcisista puede mostrar empatía, pero solo cuando le conviene o cuando está alineada con su autoimagen de “persona buena” o “sabia”.
Por ejemplo, puede consolar a alguien si eso le da admiración o refuerza su rol de protector.
Desde la TCC, esta forma de empatía se considera funcional, no genuina: no nace de la conexión con el otro, sino del deseo de controlar la situación o reforzar su autoestima.
2. Minimización emocional
Otra estrategia habitual es minimizar las emociones ajenas: “estás exagerando”, “eso no es para tanto”, “yo he vivido cosas peores”.
Esto le permite al narcisista evitar sentirse incómodo con la emoción del otro, especialmente si siente que no puede controlarla.
Este patrón suele activarse cuando el otro expresa tristeza, enojo o necesidad de apoyo, lo cual pone en jaque el narcisista, quien teme no estar a la altura o perder control sobre el vínculo.
3. Desconexión afectiva ante el sufrimiento del otro
Cuando la emoción ajena no le genera gratificación o no se ajusta a sus expectativas, el narcisista puede mostrarse frío, distante o incluso molesto.
Esto se debe a que no tolera bien el displacer emocional que no puede regular.
La TCC explica esta respuesta como una evitación emocional aprendida: sentir empatía implica exponerse al dolor del otro, lo cual puede activar sus propios esquemas de sufrimiento no resueltos.
4. Uso manipulativo de la empatía
En algunos casos, el narcisista utiliza su comprensión emocional para manipular: sabe qué decir o cuándo acercarse para lograr un objetivo (reconciliación, beneficio, control).
Este uso distorsionado de la empatía refuerza su esquema de “si no controlo, me anulan”.
Sugerencias prácticas si te vinculas con alguien con baja empatía
- No interpretes la falta de empatía como falta de inteligencia emocional global. Muchas personas narcisistas son hábiles socialmente, pero evitan la conexión real.
- Observa cuándo aparece la empatía y cuándo desaparece. Esto te dará pistas sobre si es funcional o genuina.
- Protege tu validación emocional. No bases tu autoestima en cuánto te comprende o responde el otro. Practica autovalidación.
- Pon límites a las respuestas frías o despectivas. No normalices el sarcasmo, el silencio emocional o el desprecio sutil.
- Busca acompañamiento terapéutico si estás en una relación desgastante. La falta de empatía sostenida puede erosionar tu bienestar emocional a largo plazo.
Conclusiones
Decir que un narcisista no tiene empatía es simplificar una dinámica mucho más compleja.
En muchos casos, la empatía está presente, pero bloqueada, distorsionada o utilizada para sostener una autoimagen de control.
Lo que falta no es la capacidad, sino la disposición a usarla de forma genuina y sostenida.
Desde la psicología cognitivo-conductual, el trabajo terapéutico apunta a ayudar a estas personas a contactar con su mundo emocional, flexibilizar sus creencias disfuncionales o rígidas y aprender a conectarse sin miedo ni máscaras.
Para quienes se relacionan con personas así, el camino es proteger su sensibilidad, practicar límites claros y recordar que merecen vínculos donde la empatía no sea ocasional, sino parte fundamental del amor y el respeto mutuo.
Links de interés
Recursos externos:
- ¿Cómo es la mujer narcisista?
- ¿Cómo es el hombre narcisista?
- ¿El narcisista sabe que es narcisista?
Referencias bibliográficas
- Beck, A. T. (1990). Cognitive Therapy of Personality Disorders. Guilford Press.
- Young, J. E., Klosko, J. S., & Weishaar, M. E. (2003). Terapia de esquemas. Desclée De Brouwer.
- American Psychiatric Association. (2013). DSM-5: Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales.
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