síntomas de una crisis de pánico
síntomas de una crisis de pánico

¿Cuáles son los síntomas de una crisis de pánico?

¿Cuáles son los síntomas de una crisis de pánico?

Una de las experiencias más desconcertantes que puede atravesar una persona es una crisis de pánico.

Se trata de un episodio súbito de miedo intenso acompañado de síntomas físicos y cognitivos que pueden hacer creer a quien lo sufre que está en peligro de muerte.

Desde la psicología cognitivo-conductual, comprender los síntomas de una crisis de pánico permite intervenir con eficacia y devolver a la persona el control de su vida.

síntomas de una crisis de pánico
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¿Qué es una crisis de pánico?

Una crisis de pánico es un episodio abrupto de miedo intenso que alcanza su pico en pocos minutos.

No responde a un peligro real y puede ocurrir en cualquier momento.

Se caracteriza por la aparición simultánea de varios síntomas físicos, emocionales y cognitivos.

Estas crisis pueden aparecer de forma aislada o como parte de un trastorno de pánico.

Síntomas físicos de una crisis de pánico

Uno de los aspectos más angustiosos de una crisis de pánico es la intensidad de los síntomas físicos.

A continuación, se enumeran los más comunes:

  • Palpitaciones o aceleración del ritmo cardíaco.
  • Sudoración excesiva.
  • Temblores o sacudidas.
  • Dificultad para respirar o sensación de ahogo.
  • Dolor en el pecho por ansiedad.
  • Náuseas o molestias abdominales.
  • Mareo, inestabilidad o desmayo.
  • Escalofríos o sensación de calor repentino.
  • Hormigueo en manos, pies o rostro.

Estos síntomas pueden parecer señales de un ataque cardíaco, lo que aumenta la ansiedad y refuerza el ciclo de miedo.

Síntomas cognitivos y emocionales

Los síntomas de una crisis de pánico no se limitan al cuerpo.

A nivel mental, muchas personas experimentan:

  • Miedo a perder el control.
  • Miedo a volverse loco o desmayarse.
  • Sensación de que el entorno es irreal (desrealización).
  • Sensación de estar separado del propio cuerpo (despersonalización).
  • Pensamientos catastroficos como “voy a morir” o “algo terrible está ocurriendo”.

Desde el enfoque cognitivo-conductual, estos pensamientos automáticos intensifican la percepción de amenaza y perpetúan la ansiedad.

Miedo al miedo: la ansiedad anticipatoria

Uno de los factores que mantiene las crisis de pánico es el temor a que se repitan.

Esto se conoce como ansiedad anticipatoria.

La persona comienza a evitar lugares o situaciones donde cree que podría tener una nueva crisis, lo que restringe su vida cotidiana.

Este patrón de evitación puede llevar al desarrollo de agorafobia.

¿Cómo se rompen estos patrones desde la psicología cognitivo-conductual?

La terapia cognitivo-conductual propone estrategias efectivas para romper el ciclo del pánico:

Estas técnicas no solo reducen los síntomas, sino que devuelven la sensación de control y eficacia personal.

Sugerencias prácticas para manejar una crisis de pánico

  1. Enfócate en tu respiración: Inhala profundamente por la nariz contando hasta 4, mantén 2 segundos, y exhala lentamente por la boca contando hasta 6.
  2. Recuerda que no es peligroso: Aunque intenso, el episodio pasará. Recuérdate que no estás en riesgo real.
  3. Pon atención a tu entorno: Nombrar objetos o colores en voz baja puede ayudarte a volver al presente.
  4. No huyas: Quedarte en la situación, aunque incómoda, permite que tu sistema nervioso se autorregule.
  5. Practica meditación diaria: Esto mejora tu tolerancia al malestar y reduce la reactividad emocional.
  6. Consulta con un profesional: La intervención cognitivo-conductual es altamente efectiva y puede acortar considerablemente el sufrimiento.

Conclusión

Los síntomas de una crisis de pánico pueden resultar aterradores, pero con el conocimiento adecuado y herramientas clínicas validadas es posible superar el trastorno.

Entender que el pánico no proviene de un fallo corporal, sino de una interpretación errónea del cuerpo y sus señales, es clave en el tratamiento.

Desde la psicología cognitivo-conductual, la combinación de exposición, reestructuración cognitiva y manejo de la respiración permite a las personas retomar el control de su vida.

Links de interés

Referencias bibliográficas

  • Clark, D. M. (1986). A cognitive approach to panic. Behaviour Research and Therapy, 24(4), 461–470.
  • Barlow, D. H. (2002). Anxiety and Its Disorders: The Nature and Treatment of Anxiety and Panic. Guilford Press.
  • Craske, M. G., & Barlow, D. H. (2007). Mastery of Your Anxiety and Panic: Workbook. Oxford University Press.

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